jueves, 23 de junio de 2011

Ya es pública la Orden General de Vedas 2011

El deseado momento que esperaban los cazadores por fin ha llegado. A falta de confirmación mediante su publicación en el BOJA, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha hecho pública, en la web del Instituto Andaluz de Caza y Pesca, la Orden General de Vedas para la temporada 2011/2012 en la que se especifícan los periodos hábiles de caza en todo el territorio de la Comunidad Autónoma Andaluza.
La Orden no presenta grandes cambios con respecto a la de la pasada temporada, manteniéndose las consideraciones y cambios introducidos el pasado año en la modalidad de la Perdiz Roja con Reclamo, donde además se establecen diferentes periodos de caza por zonas siendo la más afectada las zonas altas de Granada, Jaén y Almería, con recortes significativos como producto de la Carta de Emplazamiento al Reino de España enviada por la Comisión Europea. Pese a que a finales de 2010 se anunciaba su archivo, las repercusiones de dicha carta siguen estando presentes en la Orden de 2011/2012.
La noticia se ha acogido con satisfacción y alegría en el seno de la FAC, ya que este es uno de los momentos más esperados por los cazadores andaluces, que comienzan ya a perfilar y planificar su temporada. Sin embargo, los responsables federativos analizarán detalladamente la Orden y todas sus disposiciones para, en los próximos días, ofrecer un análisis exhaustivo así como una valoración de las posibles modificaciones introducidas.

viernes, 17 de junio de 2011

Especial importancia se le ha dado a las Nuevas Tecnologías como nexo de unión entre generaciones, y en este sentido, los niños y jóvenes enseñarán a los mayores a utilizar Internet o el teléfono móvil en jornadas llevadas a cabo en los centros Guadalinfo de la comarca. Esta utilización de las Nuevas Tecnologías confiere el significado al 2.0 del nombre de la iniciativa.

martes, 14 de junio de 2011

La alegría en la caza

Bretones y setters son dos de las razas más populares en los campos y montes españoles. Si el bretón es un perro codiciado para ir tras perdices y codornices, el setter es el elegido para hacer lo propio tras la esquiva becada.

martes, 7 de junio de 2011

Aparece la semiautomática

En 1902 el mismo Browning crea la primera escopeta de ciclo semiautomático fiable. Su sistema de accionamiento era el que se conoce como de largo retroceso del cañón que puede parecer similar al de corredera, ya que el cargador y la pieza elevadora de cartuchos funcionan de igual forma, pero cuya similitud es sólo superficial. En el fondo hay grandes diferencias.


Se basa en que durante el avance de la munición por el cañón no hay retroceso. Pero cuando los plomos salen del cañón, la presión que queda en el fondo hace que el culote empuje todo el conjunto hacia atrás y tanto el cañón como el cierre retroceden.




Aproximadamente a los dos tercios del recorrido, la energía consumida es tanta, que el cañón se agota y se detiene; el cierre entre tanto, debido a su menor peso, continúa hasta el tope trasero donde se realiza la expulsión; el cañón, por su parte, ha vuelto a su posición inicial merced a la acción del muelle recuperador. Justamente esto determina que en algunos sitios se conozca a este método como el sistema de muelles o resortes.


Al volver hacia adelante, el cañón descubre el elevador con un nuevo cartucho que el cierre se encarga de arrastrar hacia el interior de la recámara. La percusión ya está montada y el arma lista para efectuar un nuevo disparo con sólo apretar el gatillo.


Remington en Estados Unidos y FN de Bélgica comenzaron a fabricarla dándose el rarísimo caso de que ambas casas compartieran su producción siendo la única escopeta disponible con disparo semiautomático.


Así pasó medio siglo, lo cual es mucho tiempo en la evolución de las armas, y nada parecía cambiar. Entonces nuevamente la casa Winchester anunció su modelo 50 que en realidad quedó puesto a punto en 1954 (52 años después que la inmediatamente anterior).


Esta escopeta buscaba rebajar la pegada en el hombro producida por el del cañón. Para ello separó la recámara del resto y sólo esta parte era la que retrocedía junto con el bloque de cierre. Pero surgió un problema con el que no se contaba: el plomo de los perdigones y la combustión de la pólvora ensuciaba mucho el exterior de la recámara, deteniendo el funcionamiento después de una determinada cantidad de disparos.


Pero, volviendo un momento al sistema de largo retroceso o de muelles, hay que decir que no ha quedado obsoleto y todavía hoy se fabrican armas con él (algunas de muy buena calidad, como la Browning modelo A5) aunque, en rigor, debido al costo de producción de estas armas y la calidad de materiales que requieren, no ha habido escopetas mediocres realizadas con este sistema.